Somos una generación que como borregos estamos poniendo en práctica años de enseñanza de nuestros padres. Personas con una falta de inteligencia emocional brutal, con una inseguridad terrible cuyo origen se remonta a una ausencia de afectividad de sus padres, de las estúpidas enseñanzas estereotipadas como verdades absolutas incuestionables sobre cómo deben ser las relaciones de pareja, o por traumas vividos en algún momento de sus vidas y que no tuvieron las herramientas psicológicas para saber cómo gestionarlo. Y con todo ese déficit que llevo como lastre pues decido juntarme con otra persona y crear un proyecto de vida en común. Éste es el ejemplo real de la mayoría de las relaciones de pareja de nuestros padres y de hoy en día. Según las estadísticas el 50% de las que se inician, acaban en separación y del otro 50% que se aguantan, el 80% manifiestan no ser felices en dicha relación. Si estos datos estadísticos ya de por sí no son muy alentadores, ...